Alimentación y nutrición

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La alimentación es importante con la esclerosis múltiple. Los factores de estilo de vida como el tabaquismo, la alimentación y el ejercicio tienen un impacto en el riesgo de tener esclerosis múltiple y pueden afectar la trayectoria de la enfermedad.

La alimentación puede tener diversos impactos en la esclerosis múltiple:

• Alcanzar y mantener un peso saludable se asocia con un menor riesgo de discapacidad relacionada con la esclerosis múltiple y actividad de la enfermedad (recaídas y lesiones detectadas por resonancia magnética).
• Hay una estrecha relación entre la alimentación y el peso y la presencia de factores de riesgo cardiovascular (del corazón y los vasos sanguíneos), como la diabetes y la presión arterial y el colesterol altos.
  • La presencia de factores de riesgo cardiovascular se asocia con un nivel más alto de discapacidad relacionada con la esclerosis múltiple y actividad de la enfermedad.
  • Los factores de riesgo cardiovascular pueden provocar otros trastornos de salud (esto es, comórbidos), como enfermedades del corazón y derrames cerebrales.
• La alimentación afecta la composición del microbioma intestinal (las bacterias que viven en los intestinos), que a su vez tiene un efecto importante en el sistema inmunitario que pueden ser relevante con la esclerosis múltiple.
• Los metabolitos de la alimentación (como las vitaminas, los ácidos grasos y los aminoácidos que forman las proteínas) tienen un efecto directo en el sistema inmunitario y el cerebro.

No hay una dieta óptima para las personas con esclerosis múltiple

No hay una dieta definitiva que se haya probado científicamente que pueda cambiar la trayectoria de la esclerosis múltiple. Existen verdaderas dificultades para realizar estudios sobre la alimentación de las personas con esclerosis múltiple, y los investigadores de la enfermedad se esfuerzan por solucionarlas. La Sociedad ha financiado muchos estudios de investigación. Esperamos poder ofrecer asesoría más específica a medida que se completen estas investigaciones.
 
Si bien todavía no sabemos si una alimentación específica produciría mejoras en la esclerosis múltiple, es probable que cualquier cambio positivo que usted haga mejore su salud y bienestar en general. La mayoría de los expertos en esclerosis múltiple están de acuerdo con que una alimentación sana es importante para tener un sistema nervioso saludable a largo plazo. Los expertos concuerdan con las siguientes recomendaciones para la buena salud:

• Preparar comidas en casa en la medida posible.
• Incorporar diversas frutas y vegetales frescos a la alimentación diaria.
• Si decide comer granos, que sean enteros en vez de refinados.
• Evitar/limitar los alimentos procesados y con azúcar agregada en la medida posible.

Lea más sobre la alimentación y la esclerosis múltiple en la revista Momentum.